LOS ÚNICOS PRIVILEGIADOS SON LOS NIÑOS

Se cumplen 101 años del nacimiento de Evita, quien impulsó en 1948 —mediante la fundación Eva Perón— los Campeonatos Infantiles Evita con el objetivo de incluir al deporte y a la salud a niños que no tenían acceso a estos beneficios.

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María Eva Duarte de Perón impulsó a mediados de 1948 —mediante la Fundación Eva Perón— el Campeonato de Fútbol Infantil Doña María Eva Duarte de Perón (los Juegos Nacionales Evita), lo que significó la primera intervención del Estado en la historia argentina en materia deportiva con la intención de promover la inclusión social de niños de sectores postergados que no eran alcanzados por otros planes sociales y, al mismo tiempo, realizar un control sanitario de la población infantil.

Esta iniciativa, que integraba a clubes de barrio y también equipos del fútbol profesional —como el conjunto Pedro Ochoa, que pertenecía a las divisiones inferiores de Racing— estuvo bajo el control de la Secretaría de Salud Pública con el Dr. Ramón Carrillo como encargado. Los objetivos de los campeonatos no solo eran la democratización del deporte, sino también vincularlos e integrar a los niños con la salud. A los inscriptos, que tenían el límite de 14 años para participar, se les confeccionaba una ficha médica para que el Estado tenga información y pueda realizar un seguimiento de los niños.

En el primero que se organizó —finalizó a mediados de 1949— participaron solo niños de la Provincia de Buenos Aires y la Capital Federal. Fueron, en total, 15.205 jóvenes que disfrutaron del deporte como instrumento para integrar a diversos sectores, edades y de distintos puntos de la provincia en un principio y del país más tarde.

Luego de que fueran interrumpidos en 1955 y 1976 por los golpes de Estado que sufrió el país, en 2003 volvieron a estar presente por el decreto del presidente Néstor Kirchner, quien también los convirtió en política de Estado.

Actualmente, en los Juegos Nacionales Evita están integrados 42 deportes, incluidos seis adaptados y cuatro para adultos mayores. Cuentan también con actividades culturales. Fueron y son una herramienta de acceso a la salud y al deporte social para personas que nunca tuvieron posibilidades de contar con estos beneficios porque, como reza en la página 110 de la Memoria y Balance de la Fundación Eva Perón, los únicos privilegiados son los niños.

Thomas Somoza