Este 23 de agosto se cumplen 110 años del nacimiento de uno de los mejores jugadores de la historia del fútbol italiano. Una de las principales figuras de Italia durante los mundiales de 1934 y 1938, donde se quedaron con el campeonato del mundo. Esta es la historia de Giuseppe Meazza.
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Peppino, cómo era conocido, nació en el barrio milanés de Porta Vittoria. Desde temprana edad Giuseppe mostró una gran habilidad para el fútbol, siempre se lo veía con la redonda pegada a su pie. Su madre no aprobaba esta pasión de Peppino, por eso le escondía sus calzados, algo que a la futura estrella no le importaba y salia a jugar descalzo. Todos los días se despertaban con los primeros rayos del sol e iban a vender frutas al mercado, pero Giuseppe aprovechaba cada segundo libre para jugar a la pelota.
Decidió probar suerte en el equipo del cual él era hincha, el AC Milan. A pesar de su gran nivel no quedó en el equipo rossonneri, pero su destino estaría en la vereda de enfrente en el Internazionale de Milán. Debutó en el Inter en el año 1927, cuando tenía 17 años. Su talento innato hizo que en poco tiempo todo el mundo conozca la calidad de Giuseppe Meazza. Con las gambetas y sus goles se ganó el corazón de todos los hinchas de los Nerazzurri. En la década del ‘30 vendrían los años de gloria, tanto a nivel club cómo a nivel Selección.
Su primer partido con Italia fue el 9 de febrero de 1930, en esa ocasión los italianos se impusieron 4-2 frente a Suiza, Peppino en ese encuentro anotó 2 goles. Entre todos sus títulos, se destaca el bicampeonato del mundo conseguido en Italia 1934 y en Francia 1938. Durante esos años, Italia estaba bajo la dictadura de Benito Mussolini quien amenazó de muerte a los jugadores en caso de no quedarse con el trofeo.
El inicio de la década del 40 no arrancó de la mejor manera para el jugador italiano. En 1940 sufrió una lesión compleja que lo alejó de las canchas. No obstante, eso le permitió cumplir uno de sus sueños cómo futbolista, jugar en el AC Milan. En sus últimos años cómo jugador también defendió las camisetas de la Juventus, el VareseQ y el Atalanta. Finalizando su carrera cómo jugador en el club que lo vio nacer, el Inter de Milán
En 1980 Giuseppe Meazza tuvo su merecido reconocimiento. El 3 de marzo de ese año, el estadio donde el Inter y el Milan hacen de local fue renombrado a Giuseppe Meazza en honor a uno de los mejores jugadores de la historia italiana. Lamentablemente Peppino no pudo presenciar ese momento ya que había fallecido el 21 de agosto de 1979.
En su libro, Fútbol a sol y sombra, Eduardo Galeano dice: “En Milán, el fantasma de Giuseppe Meazza mete goles que hacen vibrar al estadio que lleva su nombre”. Hace 110 años nacía uno de los mejores jugadores del siglo XX. Peppino el grande, llevó a Italia a conseguir dos campeonatos mundiales y marcó la historia del Inter para siempre. Su sueño era triunfar en el AC Milan, sin embargo su lugar en el mundo era el Internazionale.
Ariel Mc Grath
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